Las epidemias del pasado podían acabar con familias enteras o con todos los hijos de una familia, como ocurrió con los cuatro hijos de la familia Barrios, en el centro de Guadalajara, en la epidemia de viruela de 1830, según la investigación histórica que hizo Lilia Oliver
Guadalajara ha convivido con epidemias a lo largo de su historia.
En la primera mitad del siglo XIX, entre 1800 y 1851, se tiene el registro de ocho epidemias. Las más mortíferas fueron las de viruela, en 1830, que provocó 7.3% de muertes de la población total de la ciudad, y la de cólera morbus, que abatió a 10% de los tapatíos, relató la historiadora Lilia Oliver Sánchez, entrevistada vía telefónica.
Nuestros antepasados en Guadalajara podían ser testigos de dos a tres epidemias a lo largo de su existencia.
Lilia Oliver, quien actualmente es rectora del Centro Universitario de la Costa Sur (CUCSur), con sede en Autlán, relató que en el siglo XX, la influenza española mató a 20 millones de personas en Asia y en Europa.
“Iniciando el siglo XIX, Guadalajara, como muchas ciudades del planeta, a finales de la época colonial y inicios de la joven república, sufrió las siguientes epidemias: en 1814, en plena Guerra de Independencia, se destaca una mortífera epidemia de tifo, que va a afectar de manera importante a la población de Guadalajara. Al siguiente año, en 1815, hay otra epidemia de viruela”, expuso.
La académica de la UdeG dijo que es importante aclarar que existe una gran diferencia entre las epidemias históricas y las que hoy enfrenta el mundo, con el Covid 19. Esto para no alarmar y establecer el contexto histórico de hace 200 años y la actualidad.
“Es muy importante precisar que estas epidemias históricas causaban una mortalidad extrema en las poblaciones. Eso, por suerte, se ha erradicado del planeta, este tipo de epidemias históricas. Un ejemplo mas remoto es la peste negra o peste bubónica, que a mediados del siglo XIV, se llevó entre 50 y 60% de la población de Europa. Eran epidemias terriblemente mortíferas”, señaló.
Las epidemias del pasado podían acabar con familias enteras o con todos los hijos de una familia, como ocurrió con los cuatro hijos de la familia Barrios, en el centro de Guadalajara, en la epidemia de viruela de 1830, según la investigación histórica que hizo Lilia Oliver.
“Una familia podía perder a lo largo de tres días, a cuatro de sus hijos, eso yo lo documenté para Guadalajara, una familia que se apellidaba Barrios en la parroquia del Sagrario –la parroquia del Sagrario es la que está a un lado de Catderal, es la parte céntrica de la ciudad- Este matrimonio entierra a sus cuatro hijos, todos se contagian de viruela, todos mueren de viruela”, relató.
En 1830, la epidemia de viruela mató a 2 mil tapatíos, cuando en Guadalajara se tenía una población de 29 mil habitantes.
Lilia Oliver es miembro fundador de la agrupación Historiadores de las Ciencias y las Humanidades y recordó que hace 190 años, llegaron las primeras vacunas contra la viruela a nuestra ciudad, lo que significó todo un acontecimiento.
Redacción: Ignacio Pérez Vega
Reportero Canal 44
23 de Marzo, 2020